Caótica noche en blanco

Después de estar toda la semana viendo y oyendo anunciar la Noche en blanco madrileña y echarle un vistazo al programa de actividades, anoche me lancé a la calle con la intención de visitar el edificio de la Bolsa de Madrid y el Teatro Real. Para empezar, vi que en la calle había mucha más gente de lo habitual, cola en la parada de bus y atasco de coches. Y es que la Castellana estaba para albergar espectáculos en la calle. Así que me apeé en Colón y caminé hacia Neptuno. Nada más echarme a andar vi unas colas interminables en el exterior de la Biblioteca Nacional que esperaban para ver el Códice del Cantar del Mío Cid. En esto que me cruzo con una pareja joven y oigo que él le dice a ella: "Mira: esto debe de ser el Museo Arqueológico". Sigo caminando y adelanto otra cola para ver una exposición del BBVA; llego a Cibeles y veo gente haciendo fotos a la iluminación del Palacio de Telecomunicaciones; entre tanto me adelantan un grupo de adolescentes desorientados uniformados con greñas y camiseta de Héroes del silencio; por fin llego al edificio de la Bolsa para ver un cartel que anuncia que los tickets se han agotado hace rato, veo a un señor muy trajeado excusando que los pases se acabaron media hora antes de que abrieran para la primera visita y la gente se quejaba. Decido subir por la Gran Vía, pero antes me encuentro otra cola larguísima para visitar el Banco de España; me asomo a Chueca y echo de menos el ambiente cotidiano, así que vuelvo a salir a Gran Vía; gente y más gente, de todas las edades: adultos, jovenes y niños, especialmente recuerdo uno que casi me atropella corriendo, imagino que el chaval estaría flipando porque le habían sacado de noche porque iba desbocado.
En esto que suena el teléfono, porque yo en principio había quedado. Me dicen que se les ha hecho tarde y aún están cenando en Las Rozas; le cuento que estoy camino al cine y les recomiendo tomarse con calma la cena porque Madrid está atestado de gente haciendo cola para todo, aunque no tengan ni idea de si quieren ver el Museo Arqueológico o la BNE, aunque tengan que esperar media hora o más para ver una exposición que puedes ver otro día pagando menos que por una copa.

El año pasado también estuve en Madrid esta noche; visité el Estadio Santiago Bernabéu porque sólo tenía que caminar unos metros desde el cómodo sofá de mi casa hasta la puerta del recinto. Pero anoche, desde que bajé del bus en Colón, en vista del panorama, decidí rotundamente meterme en el cine a ver una peli porque me agobia la multitud, tal y como estaban las calles seguro que los cines estaban desiertos. Ni que decir tiene que hacía rato que había descartado acercarme al Teatro Real. Parece que todo el mundo se queda sin casa a la misma hora, hay que echarse a la calle porque es hoy o nunca! Como rebaños.

Así que anoche por fin vi Caótica Ana de Julio Medem. Caótica peli. De Julio Medem dicen que explora el universo femenino; a mí es un tío que me encanta, me parece muy atractivo y creo que transmite sensibilidad. Pero casi toda la película estuve pensando que el tío tenía unas paranoias mentales de cuidado para hacer este trabajo; para empezar, no me parece creíble casi nada de lo que acontece en la película, será que a mí me gustan las pelis realistas como la vida misma. Lo que más me gustó de la película, la belleza de algunos planos y la sensibilidad que transmiten. Me gustan los planos subjetivos. Y hablando de belleza, los protagonistas están guapísimos. Destaco el cameo de Antonio Vega interpretando una preciosa canción de Los Secretos, que tanto me gustan: "Agárrate a mí María".
Después de todas las sinopsis y lo que había oído sobre la peli, intentaba buscarle sentido y encajarlo con lo que acababa de ver sentadita en la butaca. Hartos de oir que la película está dedicada e inspirada en su hermana Ana, fallecida en un accidente de tráfico muy joven, supongo que lo que el director quiere transmitir es la vitalidad y las ganas de vivir que su hermana tenía, la fuerza de vivir que irradia la alegría de una persona joven, tanta como si albergara múltiples vidas de mujer en una sola persona.

Al salir del cine por fin disfruté de un espectáculo de La noche en blanco: Family Garden, de Ron Haselden, en el Edificio España sito en Plaza de España:

Family Garden